El agua residual que llega a la instalación a través de la red de colectores, procede de los núcleos urbanos conectados a la EDAR. El pretratamiento, es la primera etapa del proceso de depuración. Consiste en retirar, toda la materia gruesa que lleva: piedras, grava, arena, ramas, plásticos, papeles, latas, botellas, componentes orgánicos y muchos otros compuestos residuales.
Con este propósito, la EDAR instala en cabecera de planta, un sistema de criba de mayor a menor distancia de paso. Destacamos tres sistemas en la zona de pretratamiento:
Pozo de gruesos: Consiste en una balsa honda donde decantan los materiales gruesos más pesados, tales como piedras y gravas, que serán posteriormente retirados mediante sistemas mecánicos, y en el que quedan retenidos los elementos en suspensión de mayor calibre a nivel de unas rejas previas al desbaste de finos.
Desbaste: En este punto, el agua residual pasa a través de un conjunto de rejas y tamices con una luz de paso cada vez más fina, con el fin de eliminar los residuos sólidos en suspensión, tales como restos de comida, plásticos, y otros componentes de medida pequeña. Finalizado el proceso de cribaje y retirada de residuos sólidos en suspensión, el agua pasa a través de un desarenador / desgrasador para eliminar las arenas y grasas.
Desarenador/desgrasador: Consiste en un tanque alargado de grandes dimensiones, donde la velocidad de paso del agua residual disminuye, y en el que se inyecta aire. Se consiguen dos objetivos: en primer lugar, eliminar las arenas, pues al reducir la velocidad de paso del agua a lo largo del canal, decantan hacia el fondo del tanque, y en segundo lugar, eliminar las grasas del agua, pues al introducir aire mediante burbuja gruesa, se consigue una separación de las mismas, concentrándolas en la superficie del tanque.
Tratamiento físico-químico: en Andorra, este tipo de tratamiento se encuentra instalado en las depuradoras de Pas de la Casa y Norte Oriental, en Canillo. El tratamiento físico-químico del agua consiste en la aportación de reactivos químicos en el agua, diferenciándose dos fases consecutivas que requieren de una agitación fuerte del agua, seguida de una agitación lenta. La primera fase, denominada coagulación, consiste en adicionar sales metálicas, como puede ser el sulfato de aluminio que, por diferencia de cargas electromagnéticas permite la unión entre partículas de medida muy pequeña, denominadas coloidales. Se forman unos coágulos, visibles a simple vista. Pero estas partículas demasiado pequeñas aún para permitir una rápida separación por sí mismas no decantarían debido a su reducido peso. La segunda fase denominada floculación, consiste en la adición de polímeros en el agua, que permiten la unión entre los coágulos, formando un elemento visible de mayor medida y que decanta rápidamente. Es lo que se denomina floculo.
En esta fase de la depuración, al sistema le falta aún por eliminar la materia orgánica disuelta (DBO5 i DQO) i el exceso de nutrientes también disueltos (nitrógeno y fósforo) que llegan con el agua residual. Destacamos dos grandes elementos que componen el corazón de la instalación: el reactor biológico y la decantación secundaria.
Reactor biológico: Aparentemente, es un simple depósito de grandes dimensiones. A él llega un agua pretratada pero cargada de materia orgánica disuelta. Esta carga contaminante es la fuente de alimentación de los microorganismos presentes en el reactor biológico. La depuración transforma este simple depósito en una granja llena de microorganismos vivos, a los cuales les aportamos la cantidad necesaria de aire para su supervivencia, crecimiento y reproducción, pues la fuente de alimentación viene dada por el agua residual a tratar. Los microorganismos encargados del tratamiento biológico residen durante un tiempo determinado en el sistema, antes de ser extraídos del mismo para mantener una población adaptada a la carga contamínate que se pretende tratar, con el fin de eliminar completamente la materia orgánica disuelta. Al final del reactor biológico, el agua está limpia de contaminantes, pero los microorganismos depuradores siguen mezclados en ella. ¿Qué hacemos con ellos?
Las depuradoras de Andorra se agrupan en dos grandes grupos:
El primer gran grupo lo encontramos en la EDAR Sur, situada en Sant Julià de Lòria, y en la EDAR Norte Occidental, ubicada en Anyós (La Massana). A este tipo de tratamientos se les denomina procesos de fangos activados. Los microorganismos del reactor biológico están en suspensión dentro del medio acuoso. En este caso, los microorganismos, al crecer, se agrupan formando estructuras, visibles a simple vista, denominadas floculos.
El segundo gran grupo lo encontramos en la EDAR del Pas de la Casa y en la EDAR Norte Oriental, situada en Canillo. Son depuradoras con reactores de lecho fluidificado, conocidas como filtros biológicos, donde los organismos del reactor biológico se encuentran fijados sobre un substrato, similar a una grava pequeña (2-4 mm de diámetro), como si de pequeñas piedras en el río se tratase. En este segundo grupo no hay decantación secundaria, y el agua ya limpia y depurada, con una excelente calidad, va directamente al río. El exceso de lodos en los filtros biológicos o biofiltros es eliminado mediante lavado a contracorriente y evacuado del sistema a través del tratamiento fisico-químico de cabecera.
Decantador secundario: Consiste en un gran depósito, generalmente de superficie circular. A él llega agua llena de floculos procedente del reactor biológico de fangos activados. Los lodos, agrupaciones de microorganismos en forma de floculos, tienen la particularidad de decantar, sedimentar dado su peso, dimensiones y diferencia de densidad con el agua. Cuando el agua llega al decantador secundario, como si de un lago se tratase, se produce un momento de calma: los floculos decantan hacia el fondo del depósito. Se produce una separación, una estratificación entre la masa de organismos, los floculos, y el agua limpia. El agua tratada es ahora apta para ser devuelta al río. El proceso de depuración del agua, ha finalizado. ¿Pero qué pasa con los lodos en exceso?
A lo largo del proceso de depuración, se han generado dos tipos de residuos o subproductos:
Durante la primera etapa de la depuración, en el pretratamiento se genera un residuo grueso, que se retira en contenedores y se transporta a un gestor autorizado.
El segundo tipo de residuo lo encontramos a nivel de las decantaciones. Son los denominados lodos y son sometidos a un proceso interno de deshidratación en la propia instalación, por el cual se les retira la mayor cantidad de agua posible, para ser posteriormente evacuados por un gestor autorizado hasta su tramiento final. Estos lodos deshidratados pueden destinarse a plantas de compostaje y usarse posteriormente como abono o bien, pueden ser transportados al Centro de Tratamiento de Residuos de Andorra donde son incinerados.